Excelente lugar para una escapada en pareja o en familia. La cabaña y el espacio es más grande de lo que se ve en fotos. La vista a la cordillera y el valle es hermosa, además es un lugar privado a pesar de no estar aislado. Las instalaciones son cómodas y están casi nuevas. Hay un montón de cosas para utilizar (nosotros ocupamos la parrilla eléctrica, por ejemplo) y otros accesorios extra: como café, pasta de dientes o cosas q se te pueden olvidar llevar. Fue una muy buena experiencia. Por ejemplo: 1. Tuvimos problemas para llegar, pues lo hicimos de noche y la dueña nos ayudó por teléfono hasta dar con el lugar, fue muy amable y bien dispuesta. 2. Nos dejaron la tinaja prendida y por la lluvia se nos apagó: por inexperiencia nuestra no pudimos prenderla de nuevo y la anfitriona envió a alguien para ayudarnos: muy agradecido por la hospitalidad y preocupación. No pudimos disfrutar de la piscina, pues el clima no nos acompañó, sin embargo se ve de primera calidad. ¡Volveremos!